¿ Qué pasa cuando nos ponemos viejos ? .
13.12.07
¿ Qué pasa cuando nos ponemos viejos, se pierden los sueños que teníamos entre preocupaciones y cuentas, entre el cínismo del cansancio y el aplastamiento del alma por la rutina y el seguir sin parar a pensar ?.
Qué ocurre, donde quedan tantos sueños no realizados, tantas espectativas, es acaso la corriente de la vida tan fuerte que no arrastra y no nos damos cuenta a donde nos arroja hasta que ya es muy tarde.
¿O acaso las propias desiciones nos hacen concluir que los sueños eran vanos y falsos?.
¿Qué ocurre realmente? ...
...Espero que mis ideas y sueños no se pierdan quizás en que lugares olvidados, no soportaría verme al espejo y olvidar quién quize llegar a ser algún día. La construcción es un camino ardúo, pero tengo la esperanza que si se vive despierto es imposible perder el rumbo .
Qué ocurre, donde quedan tantos sueños no realizados, tantas espectativas, es acaso la corriente de la vida tan fuerte que no arrastra y no nos damos cuenta a donde nos arroja hasta que ya es muy tarde.
¿O acaso las propias desiciones nos hacen concluir que los sueños eran vanos y falsos?.
¿Qué ocurre realmente? ...
...Espero que mis ideas y sueños no se pierdan quizás en que lugares olvidados, no soportaría verme al espejo y olvidar quién quize llegar a ser algún día. La construcción es un camino ardúo, pero tengo la esperanza que si se vive despierto es imposible perder el rumbo .
Bioterio de la Universidad Católica
1.8.07
Iba a escribir algo acerca de esto, pero la verdad no es necesario. No a la experimentación cruel con animales.
Seamos responsables con nuestro entorno, respetemos a todos los seres vivos.
Terror - Contra Terror
8.1.07
Terror y Contra terror.
Asistí hace un par de días, con una de mis mejores amigas y compañera de carrera, a un seminario que organizaba Amnistía Internacional. Se llamaba algo así como “Terrorismo: Un Desafío Humanitario” (al final pondré con precisión quiénes participaron como oradores y todas las especificaciones para aclarar, dónde y cuándo se realizó).
Como algunos sabrán… y otros no. Desde el atentado a Estados Unidos, el 11 de septiembre de 2001, se pueden contar además una lista bastante larga de atentados en contra de civiles –en estaciones de trenes, destrucción de edificios- en las cuales el fin último de estas, no es destruir sedes de gobierno (como podría esperarse) sino que el blanco deliberado de estos son la población civil.
La lista de países incluye entre otros a; Bali, Indonesia Octubre de 2002; Casablanca, Marruecos Mayo de 2003; Estambul, Turquía noviembre de 2003; Madrid, España marzo de 2004; Londres, Reino Unido julio de 2005; Ammán, Jordania noviembre de 2005; Dahab, Egipto abril de 2006; y Mumbai (Bombay), India julio de 2006.
Como instrumento de prevención de futuros posibles ataques, los estados afectados, además de los que “podrían ser victimas de ellos en el futuro”, adoptaron medidas para luchar contra el terrorismo –“Guerra contra el Terror”-. Olvidándose un poco, de desarrollar una serie de disposiciones para luchar contra estos actos, que se adecuaran a el Marco Regulatorio Internacional, sino que muy por el contrario actuando deliberadamente con violencia y represión, sin importarles a ellos tampoco la población civil. A mi entender jurídico, crear medidas de prevención, no es ir y bombardear poblados donde “es probable” que existan grupos terroristas armados, o ir e invadir países por que “es probable” que estén desarrollando armamentos químicos. La prevención no es reaccionar con violencia.
Estados Unidos y el resto de las naciones que intentan ganarle al terrorismo, están utilizando los mismos métodos de violencia, sólo que ellos están amparados por ellos mismos.
Supongo que las medidas que dicen utilizar son estas. *Prevención –sobre este punto, para mí, una “medida de prevención” es ir al “por qué” del actuar de estos grupos armados y solucionar por la vía internacional las problemáticas de las cuales son víctimas, escuchar lo que plantean y no reprimir por vías coercitivas a sus líderes. Y bueno esta brilla por su ausencia, por que pareciera ser, que mientras más probables terroristas son o sean ejecutados, es mejor -; *Enjuiciamiento a los autores de estos actos de violencia –respetando el debido proceso y las garantías que son otorgadas por el país o por convenciones que traten sobre D.D.H.H (la violencia en contra de las poblaciones jamás puede ser justificada)-; *La no utilización de medidas ilegales –casi como una venganza- en contra de los “posibles” autores de estos ataques; *Y agregaría yo, sancionar a los estados que son autores de abusos, ilegalidades, arbitrariedades, en la lucha contra el terrorismo (esta medida es casi impensable).
Las situaciones descritas por A.I adoptadas por muchos estados en la lucha contra el terror, para mí opinión escapan de todo marco legal-humanitario y personalmente constituyen una burla. Por un lado tenemos a población civil que sufre ataques violentos, que la comunidad internacional en su plenitud repugna –y plantean que esos mecanismos no constituyen un medio civilizado para hacerse oír u obtener decisiones favorables de la autoridad (Estado). Pero aún peor, por otro lado, nos encontramos Estados-Países que trasladan a un plano legitimo el uso de la tortura como medio de prevención del terrorismo, y que fácilmente podría ser utilizado en otras áreas –ya que la población no se opone, por que esto les causa seguridad-.
La tortura y otros tratos crueles, inhumanos y degradantes son siempre ilegales; la detención de personas sin ser informadas de sus cargos y posteriormente encarceladas e incomunicadas, sin haber sido enjuiciadas por tribunales competentes y que se hallen constituidos con anterioridad a la comisión del delito, son ilegales –e implica la no existencia del estado de derecho-; el traslado de detenidos a otros países para ser torturados y sometidos a tratos increíblemente inhumanos, sigue siendo ilegal; las confesiones obtenidas a través de apremios ilegítimos, carecen de valides; la detención indefinida en centros ocultos de detención –bueno, Guantánamo no esta oculto, y funciona a la perfección- es ilegal.
La existencia de estos actos amparados -ocultamente- por los estados, nos hace retroceder demasiado, por ejemplo: muchos de los medios que están siendo utilizados por los países para tratar a supuestos terroristas han sido proscritos, por esos mismos estados, al adherirse y ratificar tratados internacionales y sus respectivos protocolos. Además existe un irrespeto de valores que constituyen la base y orgullo de muchas de estas Naciones –Igualdad ante la Ley, Presunción de Inocencia, Libertad en todos sus ámbitos (conciencia- expresión- de desplazamiento- etc.), Respeto y Promoción del Derecho a la Vida, y pueden ser agregados demasiados principios más lamentablemente.-
Una aclaración, ocupo la expresión “Posibles Terroristas”, por que:
No han sido puestos a disposición de tribunales imparciales.
Desde su detención se habla de ellos como culpables, no existiendo una investigación pública que justifique los cargos.
El reconocimiento de un delito, tiene menos valides aún, si se obtiene a través de apremios ilegítimos.
Si se detiene a alguien, se debe informar el motivo de su detención y posteriormente ponerlo a disposición de un tribunal competente, pero si en vez de eso se los incomunica por meses, no se les informan los cargos, se les tortura y jamás se comienza un proceso legal en contra de ellos, esa detención es ilegal, y aunque fueran culpables, deberían ser dejados en libertad.
[Aquí anexo algunos artículos de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, no sé la verdad con que fin, pero bueeeH:
Artículo 1: Todos los seres humanos nacen libres e iguales en dignidad y derechos y, dotados como están de razón y conciencia, deben comportarse fraternalmente los unos con los otros.
Artículo 2: 1. Toda persona tiene todos los derechos y libertades proclamados en esta Declaración, sin distinción alguna de raza, color, sexo, idioma, religión, opinión política o de cualquier otra índole, origen nacional o social, posición económica, nacimiento o cualquier otra condición.
2. Además, no se hará distinción alguna fundada en la condición política, jurídica o internacional del país o territorio de cuya jurisdicción dependa una persona, tanto si se trata de un país independiente, como de un territorio bajo administración fiduciaria, no autónomo o sometido a cualquier otra limitación de soberanía.
Artículo 3: Todo individuo tiene derecho a la vida, a la libertad y a la seguridad de su persona.
Artículo 5: Nadie será sometido a torturas ni a penas o tratos crueles, inhumanos o degradantes.
Artículo 8: Toda persona tiene derecho a un recurso efectivo ante los tribunales nacionales competentes, que la ampare contra actos que violen sus derechos fundamentales reconocidos por la constitución o por la ley.
Artículo 9: Nadie podrá ser arbitrariamente detenido, preso ni desterrado.
Artículo 10: Toda persona tiene derecho, en condiciones de plena igualdad, a ser oída públicamente y con justicia por un tribunal independiente e imparcial, para la determinación de sus derechos y obligaciones o para el examen de cualquier acusación contra ella en materia penal.
Artículo 11: 1. Toda persona acusada de delito tiene derecho a que se presuma su inocencia mientras no se pruebe su culpabilidad, conforme a la ley y en juicio público en el que se le hayan asegurado todas las garantías necesarias para su defensa.
2. Nadie será condenado por actos u omisiones que en el momento de cometerse no fueron delictivos según el Derecho nacional o internacional. Tampoco se impondrá pena más grave que la aplicable en el momento de la comisión del delito.
[“Terrorismo: Un Desafío Humanitario” organizado como parte de la Campaña Contra la Tortura y el Terror, para marcar el quinto aniversario del centro de detención de Guantánamo, Cuba.
· Dra. Olga Ulianova (Historiadora),
· Roberto Garretón (Abogado de Derechos Humanos),
· Leonardo Aravena (Coordinador de Justicia Internacional, Amnistía Internacional).
El evento se realizaró el martes 19 de diciembre a las a 19.00 en la Biblioteca de Santiago (calle Matucana 151, Estación Metro Quinta Normal). ]
Asistí hace un par de días, con una de mis mejores amigas y compañera de carrera, a un seminario que organizaba Amnistía Internacional. Se llamaba algo así como “Terrorismo: Un Desafío Humanitario” (al final pondré con precisión quiénes participaron como oradores y todas las especificaciones para aclarar, dónde y cuándo se realizó).
Como algunos sabrán… y otros no. Desde el atentado a Estados Unidos, el 11 de septiembre de 2001, se pueden contar además una lista bastante larga de atentados en contra de civiles –en estaciones de trenes, destrucción de edificios- en las cuales el fin último de estas, no es destruir sedes de gobierno (como podría esperarse) sino que el blanco deliberado de estos son la población civil.
La lista de países incluye entre otros a; Bali, Indonesia Octubre de 2002; Casablanca, Marruecos Mayo de 2003; Estambul, Turquía noviembre de 2003; Madrid, España marzo de 2004; Londres, Reino Unido julio de 2005; Ammán, Jordania noviembre de 2005; Dahab, Egipto abril de 2006; y Mumbai (Bombay), India julio de 2006.
Como instrumento de prevención de futuros posibles ataques, los estados afectados, además de los que “podrían ser victimas de ellos en el futuro”, adoptaron medidas para luchar contra el terrorismo –“Guerra contra el Terror”-. Olvidándose un poco, de desarrollar una serie de disposiciones para luchar contra estos actos, que se adecuaran a el Marco Regulatorio Internacional, sino que muy por el contrario actuando deliberadamente con violencia y represión, sin importarles a ellos tampoco la población civil. A mi entender jurídico, crear medidas de prevención, no es ir y bombardear poblados donde “es probable” que existan grupos terroristas armados, o ir e invadir países por que “es probable” que estén desarrollando armamentos químicos. La prevención no es reaccionar con violencia.
Estados Unidos y el resto de las naciones que intentan ganarle al terrorismo, están utilizando los mismos métodos de violencia, sólo que ellos están amparados por ellos mismos.
Supongo que las medidas que dicen utilizar son estas. *Prevención –sobre este punto, para mí, una “medida de prevención” es ir al “por qué” del actuar de estos grupos armados y solucionar por la vía internacional las problemáticas de las cuales son víctimas, escuchar lo que plantean y no reprimir por vías coercitivas a sus líderes. Y bueno esta brilla por su ausencia, por que pareciera ser, que mientras más probables terroristas son o sean ejecutados, es mejor -; *Enjuiciamiento a los autores de estos actos de violencia –respetando el debido proceso y las garantías que son otorgadas por el país o por convenciones que traten sobre D.D.H.H (la violencia en contra de las poblaciones jamás puede ser justificada)-; *La no utilización de medidas ilegales –casi como una venganza- en contra de los “posibles” autores de estos ataques; *Y agregaría yo, sancionar a los estados que son autores de abusos, ilegalidades, arbitrariedades, en la lucha contra el terrorismo (esta medida es casi impensable).
Las situaciones descritas por A.I adoptadas por muchos estados en la lucha contra el terror, para mí opinión escapan de todo marco legal-humanitario y personalmente constituyen una burla. Por un lado tenemos a población civil que sufre ataques violentos, que la comunidad internacional en su plenitud repugna –y plantean que esos mecanismos no constituyen un medio civilizado para hacerse oír u obtener decisiones favorables de la autoridad (Estado). Pero aún peor, por otro lado, nos encontramos Estados-Países que trasladan a un plano legitimo el uso de la tortura como medio de prevención del terrorismo, y que fácilmente podría ser utilizado en otras áreas –ya que la población no se opone, por que esto les causa seguridad-.
La tortura y otros tratos crueles, inhumanos y degradantes son siempre ilegales; la detención de personas sin ser informadas de sus cargos y posteriormente encarceladas e incomunicadas, sin haber sido enjuiciadas por tribunales competentes y que se hallen constituidos con anterioridad a la comisión del delito, son ilegales –e implica la no existencia del estado de derecho-; el traslado de detenidos a otros países para ser torturados y sometidos a tratos increíblemente inhumanos, sigue siendo ilegal; las confesiones obtenidas a través de apremios ilegítimos, carecen de valides; la detención indefinida en centros ocultos de detención –bueno, Guantánamo no esta oculto, y funciona a la perfección- es ilegal.
La existencia de estos actos amparados -ocultamente- por los estados, nos hace retroceder demasiado, por ejemplo: muchos de los medios que están siendo utilizados por los países para tratar a supuestos terroristas han sido proscritos, por esos mismos estados, al adherirse y ratificar tratados internacionales y sus respectivos protocolos. Además existe un irrespeto de valores que constituyen la base y orgullo de muchas de estas Naciones –Igualdad ante la Ley, Presunción de Inocencia, Libertad en todos sus ámbitos (conciencia- expresión- de desplazamiento- etc.), Respeto y Promoción del Derecho a la Vida, y pueden ser agregados demasiados principios más lamentablemente.-
Una aclaración, ocupo la expresión “Posibles Terroristas”, por que:
No han sido puestos a disposición de tribunales imparciales.
Desde su detención se habla de ellos como culpables, no existiendo una investigación pública que justifique los cargos.
El reconocimiento de un delito, tiene menos valides aún, si se obtiene a través de apremios ilegítimos.
Si se detiene a alguien, se debe informar el motivo de su detención y posteriormente ponerlo a disposición de un tribunal competente, pero si en vez de eso se los incomunica por meses, no se les informan los cargos, se les tortura y jamás se comienza un proceso legal en contra de ellos, esa detención es ilegal, y aunque fueran culpables, deberían ser dejados en libertad.
[Aquí anexo algunos artículos de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, no sé la verdad con que fin, pero bueeeH:
Artículo 1: Todos los seres humanos nacen libres e iguales en dignidad y derechos y, dotados como están de razón y conciencia, deben comportarse fraternalmente los unos con los otros.
Artículo 2: 1. Toda persona tiene todos los derechos y libertades proclamados en esta Declaración, sin distinción alguna de raza, color, sexo, idioma, religión, opinión política o de cualquier otra índole, origen nacional o social, posición económica, nacimiento o cualquier otra condición.
2. Además, no se hará distinción alguna fundada en la condición política, jurídica o internacional del país o territorio de cuya jurisdicción dependa una persona, tanto si se trata de un país independiente, como de un territorio bajo administración fiduciaria, no autónomo o sometido a cualquier otra limitación de soberanía.
Artículo 3: Todo individuo tiene derecho a la vida, a la libertad y a la seguridad de su persona.
Artículo 5: Nadie será sometido a torturas ni a penas o tratos crueles, inhumanos o degradantes.
Artículo 8: Toda persona tiene derecho a un recurso efectivo ante los tribunales nacionales competentes, que la ampare contra actos que violen sus derechos fundamentales reconocidos por la constitución o por la ley.
Artículo 9: Nadie podrá ser arbitrariamente detenido, preso ni desterrado.
Artículo 10: Toda persona tiene derecho, en condiciones de plena igualdad, a ser oída públicamente y con justicia por un tribunal independiente e imparcial, para la determinación de sus derechos y obligaciones o para el examen de cualquier acusación contra ella en materia penal.
Artículo 11: 1. Toda persona acusada de delito tiene derecho a que se presuma su inocencia mientras no se pruebe su culpabilidad, conforme a la ley y en juicio público en el que se le hayan asegurado todas las garantías necesarias para su defensa.
2. Nadie será condenado por actos u omisiones que en el momento de cometerse no fueron delictivos según el Derecho nacional o internacional. Tampoco se impondrá pena más grave que la aplicable en el momento de la comisión del delito.
[“Terrorismo: Un Desafío Humanitario” organizado como parte de la Campaña Contra la Tortura y el Terror, para marcar el quinto aniversario del centro de detención de Guantánamo, Cuba.
· Dra. Olga Ulianova (Historiadora),
· Roberto Garretón (Abogado de Derechos Humanos),
· Leonardo Aravena (Coordinador de Justicia Internacional, Amnistía Internacional).
El evento se realizaró el martes 19 de diciembre a las a 19.00 en la Biblioteca de Santiago (calle Matucana 151, Estación Metro Quinta Normal). ]
Etiquetas: Mundo?
Esto no es una alegoria, no es una celebración. [El camino no se acaba]
Pinochet falleció, ayer domingo, un día que muchas personas soñaron, añoraron, imaginaron, y creyeron que de una forma u otra provocaría un cambio trascendental en el país. Claro aparte de las diversas reacciones: Mujeres en estado de histeria, celebraciones que se empañaron con desmanes, celebraciones en variados-curiosos lugares.
¿Por qué dedicar palabras a este acontecimiento?.
Es muy simple, hace tiempo creo haber asumido un compromiso conmigo misma-mi conciencia, de lograr avances en el tema de los Derechos Humanos, sea cualquiera sea su alcance: temas de género, temas laborales, infancia, libertades sexuales [mujeres-hombres] e igualdades, y la lista es larga.
Algunos pensarán que con la muerte de Pinochet, esta tarea acaba, ya que su muerte incluye el cierre de causas. Pero la verdad, miremos la realidad y el tema no desde una perspectiva limitada: Pinochet fue juzgado, se iniciaron contra el causas en Inglaterra, por crímenes de lesa humanidad, que son de interés de toda la comunidad internacional, se reabrió la causa de la caravana de la muerte -causa que mucha gente pensó pasaría al olvido judicial- y no fue así.
Esta tarea no se acaba, aunque es difícil enfrentarse a seres fanatizados que consideran la tortura, el terrorismo de estado, el secuestro permanente, la ejecución por causas políticas (cuando la pena de muerte ha sido abolida hace tiempo), como medios legítimos de exterminio de grupos con un pensamiento político determinado. Creo que eso es lo más difícil de todo, cambiar la visión de hechos, que aunque sean favorables o desfavorables para segmentos de la sociedad, constituyen crímenes de lesa humanidad y no "el triunfo sobre el cáncer marxista".
Algunos se preguntan, hasta cuando se tocará este tema, y yo si fuera capas de llevar una discusión serena y sin caer en descalificaciones (hacia mí), les respondería: "cuándo este tema se ha tratado cómo es, no como pretenden algunos denominarlo de causa de -separación del país-. Cuándo se dejarán de alegrar de la violencia como medio legitimo-legitimizado por el miedo. Y cuándo las miles de personas podrán descansar su alma, al saber a ciencia cierta que ocurrió con padres, hermanos, hijos, madres, tíos, amigos, abuelos. Cuándo se hablará con respeto y conciencia, de que no es una causa de orgullo para la memoria de un país".
La muerte no es causa de alegría, por eso, este día no celebro nada.
Acá les dejo un extracto de un comunicado de Amnistía Internacional:
Falleció Pinochet – la búsqueda de justicia persiste
El ex gobernante de facto Augusto Pinochet, de 91 años, falleció el domingo 10 de diciembre en el Hospital Militar de Santiago de Chile. Pinochet enfrentó una prolongada batalla legal por sus responsabilidades en graves violaciones de Derechos Humanos y delitos de lesa humanidad sin haber recibido sentencia, lo que debe hacer notar a los gobiernos la importancia crucial de no retrasar la acción de la justicia, lo que a menudo conlleva denegársela también a las víctimas.
La muerte de Pinochet no cierra el capítulo más oscuro de la historia de Chile, una etapa que estuvo marcada por gravísimas violaciones de derechos humanos y por la impunidad. Ahora está en manos del poder judicial chileno evitar que reine la impunidad en el país llevando ante los tribunales a todos los responsables de graves violaciones de derechos humanos durante el gobierno militar.
Amnistía Internacional seguirá actuando en favor de que se haga justicia a las víctimas de las violaciones de derechos humanos cometidas durante el régimen de Pinochet. Seguiremos exigiendo que todos los obstáculos a la justicia, especialmente que la Ley de Amnistía (Decreto 2.191) –promulgada durante el gobierno de Augusto Pinochet y que, hasta ahora, ha protegido del procesamiento a los autores de violaciones de derechos humanos– se declare nula y sin efecto.
En los últimos 30 años, miles de víctimas y familiares de víctimas de violaciones de derechos humanos cometidas por el gobierno de Pinochet en Chile y otros países latinoamericanos han manifestado a Amnistía Internacional su convicción de que sólo la justicia ayudará a curar las heridas. Lo que reclaman, y merecen, es que los responsables de los abusos contra los derechos humanos cometidos en Chile sean juzgados por un sistema judicial independiente, un paso con el que Chile demostraría al mundo que ya no va a tolerar la impunidad.
Si no se hace justicia, el mensaje transmitido será que el uso de la tortura, los malos tratos y la "desaparición" continúan siendo tolerados en Chile.
Principales acontecimientos
Augusto Pinochet gobernó Chile entre 1973 y 1990, tras derrocar al presidente socialista Salvador Allende el 11 de septiembre de 1973.
Durante el régimen de Pinochet hubo informes sobre miles de casos de violaciones de derechos humanos.
Según el informe elaborado en 1991 por la Comisión Rettig (Comisión Nacional de Verdad y Reconciliación de Chile), 3.196 personas murieron como consecuencia de la violencia política durante el régimen de Pinochet. De estas, 1.185 continúan desaparecidas.
El Estadio Nacional y la Villa Grimaldi –donde la actual presidenta chilena, Michelle Bachelet, y su madre estuvieron recluidas en 1975– están entre los centros de detención a los que fueron conducidas las personas detenidas en su mayoría. El último es actualmente un centro conmemorativo.
Desde 1998, Pinochet fue acusado de decenas de violaciones de derechos humanos pero hasta la fecha no se ha enfrentado a juicio debido a barreras legales –en particular, la inmunidad de que disfrutó como ex presidente y senador– y a problemas de salud.
Al momento de su fallecimiento Pinochet estaba procesado ante los tribunales chilenos en relación con una investigación financiera –el caso Riggs– y cinco causas de derechos humanos: Villa Grimaldi, Operación Colombo, Operación Cóndor, la Caravana de la Muerte y el caso Prats.
Equipo de Comunicaciones
Amnistía Internacional - Chile
Entérate, indígnate y actúa
Comunicado de prensa, 10 de diciembre de 2006
¿Por qué dedicar palabras a este acontecimiento?.
Es muy simple, hace tiempo creo haber asumido un compromiso conmigo misma-mi conciencia, de lograr avances en el tema de los Derechos Humanos, sea cualquiera sea su alcance: temas de género, temas laborales, infancia, libertades sexuales [mujeres-hombres] e igualdades, y la lista es larga.
Algunos pensarán que con la muerte de Pinochet, esta tarea acaba, ya que su muerte incluye el cierre de causas. Pero la verdad, miremos la realidad y el tema no desde una perspectiva limitada: Pinochet fue juzgado, se iniciaron contra el causas en Inglaterra, por crímenes de lesa humanidad, que son de interés de toda la comunidad internacional, se reabrió la causa de la caravana de la muerte -causa que mucha gente pensó pasaría al olvido judicial- y no fue así.
Esta tarea no se acaba, aunque es difícil enfrentarse a seres fanatizados que consideran la tortura, el terrorismo de estado, el secuestro permanente, la ejecución por causas políticas (cuando la pena de muerte ha sido abolida hace tiempo), como medios legítimos de exterminio de grupos con un pensamiento político determinado. Creo que eso es lo más difícil de todo, cambiar la visión de hechos, que aunque sean favorables o desfavorables para segmentos de la sociedad, constituyen crímenes de lesa humanidad y no "el triunfo sobre el cáncer marxista".
Algunos se preguntan, hasta cuando se tocará este tema, y yo si fuera capas de llevar una discusión serena y sin caer en descalificaciones (hacia mí), les respondería: "cuándo este tema se ha tratado cómo es, no como pretenden algunos denominarlo de causa de -separación del país-. Cuándo se dejarán de alegrar de la violencia como medio legitimo-legitimizado por el miedo. Y cuándo las miles de personas podrán descansar su alma, al saber a ciencia cierta que ocurrió con padres, hermanos, hijos, madres, tíos, amigos, abuelos. Cuándo se hablará con respeto y conciencia, de que no es una causa de orgullo para la memoria de un país".
La muerte no es causa de alegría, por eso, este día no celebro nada.
Acá les dejo un extracto de un comunicado de Amnistía Internacional:
Falleció Pinochet – la búsqueda de justicia persiste
El ex gobernante de facto Augusto Pinochet, de 91 años, falleció el domingo 10 de diciembre en el Hospital Militar de Santiago de Chile. Pinochet enfrentó una prolongada batalla legal por sus responsabilidades en graves violaciones de Derechos Humanos y delitos de lesa humanidad sin haber recibido sentencia, lo que debe hacer notar a los gobiernos la importancia crucial de no retrasar la acción de la justicia, lo que a menudo conlleva denegársela también a las víctimas.
La muerte de Pinochet no cierra el capítulo más oscuro de la historia de Chile, una etapa que estuvo marcada por gravísimas violaciones de derechos humanos y por la impunidad. Ahora está en manos del poder judicial chileno evitar que reine la impunidad en el país llevando ante los tribunales a todos los responsables de graves violaciones de derechos humanos durante el gobierno militar.
Amnistía Internacional seguirá actuando en favor de que se haga justicia a las víctimas de las violaciones de derechos humanos cometidas durante el régimen de Pinochet. Seguiremos exigiendo que todos los obstáculos a la justicia, especialmente que la Ley de Amnistía (Decreto 2.191) –promulgada durante el gobierno de Augusto Pinochet y que, hasta ahora, ha protegido del procesamiento a los autores de violaciones de derechos humanos– se declare nula y sin efecto.
En los últimos 30 años, miles de víctimas y familiares de víctimas de violaciones de derechos humanos cometidas por el gobierno de Pinochet en Chile y otros países latinoamericanos han manifestado a Amnistía Internacional su convicción de que sólo la justicia ayudará a curar las heridas. Lo que reclaman, y merecen, es que los responsables de los abusos contra los derechos humanos cometidos en Chile sean juzgados por un sistema judicial independiente, un paso con el que Chile demostraría al mundo que ya no va a tolerar la impunidad.
Si no se hace justicia, el mensaje transmitido será que el uso de la tortura, los malos tratos y la "desaparición" continúan siendo tolerados en Chile.
Principales acontecimientos
Augusto Pinochet gobernó Chile entre 1973 y 1990, tras derrocar al presidente socialista Salvador Allende el 11 de septiembre de 1973.
Durante el régimen de Pinochet hubo informes sobre miles de casos de violaciones de derechos humanos.
Según el informe elaborado en 1991 por la Comisión Rettig (Comisión Nacional de Verdad y Reconciliación de Chile), 3.196 personas murieron como consecuencia de la violencia política durante el régimen de Pinochet. De estas, 1.185 continúan desaparecidas.
El Estadio Nacional y la Villa Grimaldi –donde la actual presidenta chilena, Michelle Bachelet, y su madre estuvieron recluidas en 1975– están entre los centros de detención a los que fueron conducidas las personas detenidas en su mayoría. El último es actualmente un centro conmemorativo.
Desde 1998, Pinochet fue acusado de decenas de violaciones de derechos humanos pero hasta la fecha no se ha enfrentado a juicio debido a barreras legales –en particular, la inmunidad de que disfrutó como ex presidente y senador– y a problemas de salud.
Al momento de su fallecimiento Pinochet estaba procesado ante los tribunales chilenos en relación con una investigación financiera –el caso Riggs– y cinco causas de derechos humanos: Villa Grimaldi, Operación Colombo, Operación Cóndor, la Caravana de la Muerte y el caso Prats.
Equipo de Comunicaciones
Amnistía Internacional - Chile
Entérate, indígnate y actúa
Comunicado de prensa, 10 de diciembre de 2006
